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Presidencia húngara anuncia sus propuestas en materia de inmigración
Hungría ocupa la presidencia de turno de la UE durante el primer semestre de 2011.
Hungría ocupa en el presente semestre (enero-junio de 2011) la presidencia de turno de la Unión Europea.
Recientemente ha publicado el programa con sus objetivos en este periodo. En el apartado correspondiente a Justicia e Interior, la presidencia húngara expone sus propuestas en materia de inmigración.
Entre otras iniciativas y teniendo en cuenta la operatividad media de las acciones dado el breve tiempo de la presidencia, se anuncia la promoción del acceso de Rumanía y Bulgaria al espacio Schengen afirmando que ambos países han realizado grandes esfuerzos en su preparación para acceder al mismo.
También se propone una mejor gestión de los flujos migratorios atendiendo a los beneficios de la inmigración; la presidencia tiene la intención de trasladar la idea de que una política de migración más equilibrada geográficamente es esencial.
Se hace referencia a la importancia de lograr un sistema de asilo eficiente que proporcione un alto nivel de protección en todos los puntos de la UE tanto para solicitantes de asilo como para los demandantes de protección subsidiaria. Para ello, la presidencia húngara contribuirá con la creación de un Sistema Común Europeo de Asilo.
Por último, se afirma que la gestión migratoria no puede ser efectiva sin una correcta gestión de fronteras. Por eso, la presidencia húngara seguirá reforzando la estructura FRONTEX e instando a modificar el Código de Fronteras Schengen con el fin de que quede reflejado todo lo aprendido durante estos años.
A raíz de la presentación de este programa, el Consejo Europeo de Refugiados y Exiliados (ECRE), red de la que Accem participa, ha hecho públicas sus recomendaciones.
ECRE insiste en la necesidad de garantizar un compromiso sobre la creación de un Sistema Común Europeo de Asilo (CEAS) que asegure que se respeten los derechos de los solicitantes de asilo y de las personas beneficiarias de otro tipo de protección internacional.
Para ello, el compromiso no sólo radica en la legislación sobre asilo sino también en las prácticas de cooperación y solidaridad entre los Estados miembros, así como en materia de refugiados y de reasentamiento.
Por último, para los solicitantes de protección internacional se reitera la necesidad de llevar a cabo un control transparente y eficiente de la frontera greco-turca, así como la urgencia de cooperar con Libia, condicionando dicha cooperación a la anexión del país a la Convención de los Refugiados de 1951 y el compromiso de respetar los Derechos Humanos de los solicitantes de asilo, migrantes y refugiados.
Fuente: EUMIGRE (febrero de 2011).